HNI 2017: HACE UN AÑO, LA
GESTA DE LOS AMAUTAS DEL PERU.
En los próximos días se recordará el primer año de una de las
más grandes movilizaciones del magisterio peruano. Nos referimos al 12 de julio del 2017,
fecha de inicio de la Huelga Nacional Indefinida (HNI), la más contundente y
multitudinaria gesta sindical de los SUTE Regionales, acontecimiento que puso
en discusión las políticas de privatización de la educación pública y el
irrefrenable atropello laboral contra los maestros y maestras del Perú.
Desde
cualquier ángulo de análisis, la HNI de los Amautas, como se ha calificado a
esta gesta, fue una de las más importantes luchas sindicales de las últimas cuatro
décadas, el de mayor impacto político del naciente siglo XXI. Aparte de
movilizar al magisterio de las 25 regiones, la HNI creó un escenario de crisis
política, superior en impacto a las contradicciones entre el oficialismo y el
fujimorismo; provocó la caída del gabinete ministerial de Fernando Zavala, uno
de los lobystas más estrechamente vinculados al poder transnacional, llegando a
censurarlo en las calles y plazas de las principales ciudades del Perú.
Finalmente,
la HNI terminó por hundir al autodenominado Partido Comunista del Perú - Patria
Roja, un minúsculo partido de la vieja izquierda cuyos militantes en la
conducción del CEN-Patria Roja sobreviven de las prebendas estatales,
convertido hoy en un instrumento servil de quienes siempre han detentado el poder
en el Perú.
El
impacto de la HNI se llevó de encuentro a Marilú Martens y Carlos Basombrio (ex
PCR), dos ex ministros que junto a Alfredo Velásquez y cía. del CEN Patria Roja
levantaron la repudiable estrategia del terruqueo mediático contra el magisterio,
poniendo en evidencia que los estrategas del neoliberalismo criollo y el
sindicalismo colaboracionista al final sostienen el mismo modelo
económico-laboral, y que su alianza estratégica (MINEDU-CEN) no se limita sólo
al control de la millonaria Derrama Magisterial.
Poner
en evidencia la privatización de la educación pública y la abusiva reforma
laboral, con base en un andamiaje legislativo construido durante casi treinta
años en el Perú para encaminar la imposición del modelo neoliberal, fueron dos
de los aspectos centrales que los SUTE Regionales dirigido por el maestro Pedro
Castillo colocaron en debate, sin obtener una respuesta coherente y convincente
de los representantes del poder. Gracias a la pedagogía sindical hoy la
población tiene claro el inmenso peligro que representan las políticas
privatizadoras en el sector educación.
Como
está demostrado la privatización de la educación tan extendida en Chile,
México, Colombia y otros países de la región, como el Perú, ha acentuado el
agravamiento de otros problemas como desigualdad educativa, precarización en la
formación escolar, congelamiento salarial del profesorado, recorte de los
derechos laborales de este sector profesional, etc. provocando el
multitudinario rechazo de este importante sector profesional. No debemos
olvidar que la reforma antilaboral y antisindical en el Perú fue inspirada en
las tesis contenidas en el texto “Revolución Laboral en Chile” del millonario
empresario neoliberal José Pinera Echenique, entonces Ministro de Trabajo
(1978-1979) de la dictadura pinochetista, actual Presidente de Chile.
En
nuestro país, la privatización de la educación, particularmente en la educación
superior, ha abierto recientemente una veta que nos habla de su impacto
corruptor en otros ámbitos de la vida pública. En estos días viene destapándose
en nuestro país las tratativas bajo la mesa y el tráfico de influencias
promovidos por cuestionados empresarios de universidades privadas (Telesup y
otras) para posicionarse en importantes instituciones públicas como la ONPE, el
Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), el Poder Judicial con intenciones de
controlarlas, digitar a favor de sus poderosos intereses económicos y
eventualmente re-instalar en el país un poderoso sistema de corrupción en las
propias entrañas del aparato estatal al estilo del proceso fujimontesinista de
los años 90.
En
suma, grandes lecciones nos ha dejado la HNI, entre ellas la sólida solidaridad
del magisterio peruano y el convencimiento de su rol contra aquellas políticas
educativas y laborales que contravienen el bienestar de las mayorías. Asimismo
grandes desafíos como el de la urgente ligazón orgánica y política con el
movimiento de masas, profundamente debilitado por el impacto de las últimas
políticas laborales.
Este
será, sin duda, una tarea inaplazable para los SUTE Regionales, reitero, cerrar
el vacio de conducción sindical visible en este periodo. Esto es importante
para una recomposición del equilibrio en un orden cada vez más desigual y
excluyente.
Enfatizamos,
por ello, la importancia de la organización sindical, el estudio de la realidad
peruana, la defensa de los principios del sindicalismo clasista, etc. sin cuyo
posicionamiento será imposible entender la perspectiva histórica del sindicato
magisterial, de capital importancia en estos instantes de lucha contra el
modelo neoliberal en el Perú.
Hacer política desde una perspectiva democrática,
adecentarla en todas sus dimensiones. Concluyo parafraseando al maestro
brasilero Paulo Freire, forjar y desarrollar la politicidad transformadora de
los maestros y maestras del Perú.
La gloriosa marcha de los amautas se convierte en un hito de la historia del magisterio en el siglo XXI. Por lo mismo, la responsabilidad de quienes somos maestros es grande, pues al mismo tiempo que tenemos que realizar nuestra labor en las aulas, necesitamos ejercer una participación que permita consolidar la naciente organización magisterial.
ResponderEliminar