En tiempos en que el modelo neoliberal perpetra severas
agresiones contra la clase trabajadora (recorte de vacaciones, eliminación de
CTS, contratación laboral indefinida, congelamiento del salario mínimo,
procesos disciplinarios con fines de destitución, etc.) los maestros y maestras
de Lima Metropolitana continuamos luchando.
La vitalidad en crecimiento de nuestro sindicato se
fortalece y nutre en cada marcha, en cada plantón, en cada espacio de la lucha
sindical. No nos atemoriza ni disminuye moralmente las sanciones económicas y
disciplinarias provenientes de quienes representan al poder neoliberal,
corrupto y vendepatria. La lucha continua.
En todo instante de nuestra brega debe quedar claro
que el sindicato es el principal instrumento de solidaridad,
cohesión y defensa de nuestros intereses de clase. Su construcción y
fortalecimiento orgánico a nivel sectoral, regional y nacional representan al
2019 nuestro más caro desafío.
En el año venidero forjemos sindicato de clase, con
espíritu clasista como decía el Amauta Mariátegui. Un sindicato para la lucha,
no para el contubernio y el sometimiento al poder neoliberal.
Forjemos sindicato plasmando en el terreno de los hechos
el único concepto de unidad que reconocemos los trabajadores, la unidad en la
acción, la unidad en la lucha por la defensa irrestricta de los derechos del
magisterio peruano y la defensa de la educación pública en nuestro país.
En estas fiestas navideñas, desde el SUTE LIMA un caluroso
saludo al magisterio limeño, LA LUCHA CONTINUA.
Lima, diciembre del 2018.
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